Artículo de Agustín Moreno, histórico dirigente de CC OO y del Sector Crítico, defendido durante su intervención en la Universidad de Verano de León el 15 de septiembre de 2009: Las condiciones de vida y de trabajo de buena parte de la Humanidad se ven cada día más afectadas por el capitalismo global y por la estrategia neoliberal desarrollada. Estamos en un momento histórico en el que el desarrollo de las fuerzas tecnológicas y productivas ha alcanzado un grado tal que permitiría alimentar y satisfacer las necesidades fundamentales de las personas. Pero, paradójicamente, vemos que existen más de mil millones de personas que pasan hambre, más de dos mil millones que viven en condiciones de extrema pobreza, que en España hay más de cuatro millones de parados y millones de jóvenes viven en condiciones de grave precariedad, al tiempo que aumentan los indicadores de exclusión social.
El afán del capitalismo por aumentar su tasa de ganancia hace que crezca la pobreza y la desigualdad a nivel mundial y local, que se recurra al uso de la guerra para resolver sus contradicciones en la lucha por las materias primas y los mercados, y que el deterioro medioambiental parezca imparable.
El afán del capitalismo por aumentar su tasa de ganancia hace que crezca la pobreza y la desigualdad a nivel mundial y local, que se recurra al uso de la guerra para resolver sus contradicciones en la lucha por las materias primas y los mercados, y que el deterioro medioambiental parezca imparable.
La actual crisis económica está recrudeciendo los ataques neoliberales al derecho del trabajo, al estado de bienestar y a los derechos sindicales. Generarán sin duda una nueva división y organización del trabajo a nivel internacional y en las empresas, se acentuarán los masivos movimientos de población en el mundo y los grandes problemas medioambientales. Es el momento de optimizar la utilización de los derechos sindicales (y democráticos) para defender los intereses de los trabajadores y de la mayoría social, tanto en el ámbito internacional como en el local. El sindicalismo democrático tiene nuevos e ineludibles retos.
